miércoles, marzo 23, 2005

Prefiero las ideas

(Respuesta a un ataque frontal en cuanto que crítico con la LOGSE. -2-).

Hola amigo
Dejaré de lado el ataque personal puesto que como persona me mereces todos los respectos, y como profesional, también. Tampoco me dedicaré a defenderme de las lindezas que me has lanzado, que por cierto, están muy elaboradas. Entiendo el recurso pero creo que los vuelos en rasante dan menos visión de conjunto y disminuyen enormemente el foco.
Te ruego, por tanto, que no entiendas el ataque a tus ideas como un ataque a ti mismo. Ni es mi pretensión, ni considero que el cuerpo a cuerpo personal sirva para mucho, excepto para liberar testosterona.Te aclaro un par de puntos y volvemos a las ideas. ¿Te parece?
¿Hablas de Psicopedagogo reconvertido? No. Mira. Fui profesor de matemáticas en EGB. Saqué mi oposición a los 20 años. Más tarde estudie Psicología por la noche, porque durante el día trabajaba. También hice, por la noche, la especialidad de Transtornos de Lenguaje y Audición en San Pablo, dos añitos, y un curso (ahora master) de Pedagogía Terapéutica.
Tras acabar la licenciatura hice el Doctorado, ya sabes Cursos Monográficos y 4 años de investigación. Cuando me interesó dar el paso a Secundaria, lo hice. Saqué mi oposición, como tu, supongo y estoy en un instituto. Esta es mi reconversión.
Respecto a los Psicopedagogos, sé lo que se piensa en general, que es lo que piensas tu, y también yo. Lo soy, pero no me siento incluido en ese grupo, porque ni tengo las mismas creencias, ni hago lo que ellos hacen. Para empezar, ellos viven a la sombra de una Logse en que no creo, en calidad de expertos, que tampoco lo son. Se podría decir, para no exagerar, que algunos de estos profesionales representan la parte más siniestra de la Logse, la del intermediario entre la verdad absoluta y la praxis, la del ninguneo del Profesor, la del experto en burocracia, la del diagnosticador de obviedades, la de defensor del niño roussuniano (todos los niños son buenos por ser niños, que contradice la experiencia) que tanto te gusta, etc.
No trabajo con papeles ni protocolos, ni estoy todo el día reunido, sino con alumnos con deficiencias de escolarización y complicados y lo hago las horas que me son asignadas. Y además tengo ganas de que se regule el papel del Psicopedagogo en los IESs, en Cataluña, como ya lo está en el resto de España. Soy crítico con lo que hace el Psicopedagogo en la actualidad, aquí, pero defiendo que puede hacer cosas mucho mejores, a poco que se posibilite.Pero volvamos a lo nuestro.
Criticas, como yo, al Psicopedagogo, pero el énfasis que tu haces hacia lo personal (hacen eso porque son Psicopedagogos), yo lo desplazo hacia la ideología que lo da sustenta (hacen esta burocracia, porque están concebidos para ello, y fuera de ella no tienen sitio). Y obviamente, discrepo de esta concepción. Ya lo creo que podemos hacer cosas, y cosas buenas, pero no son estas que hacemos.Hablas de los padres del cognitivismo: Piaget, Vigotsky... Yo comparto el núcleo del pensamiento científico de estos autores, pero no la utilización que se ha hecho de ellos a modo de cobertura científica para dar una patina de barniz moderno y progre a lo que no era en el fondo más que método, caja negra y desprecio por los resultados. Ni el método ha resultado útil, ni el alumno es una caja negra, ni los resultados son despreciables.
Estos autores, y otros, nos han demostrado que la Psicología no es esto que se hace, aunque esto que se hace, la Logse lo venda como tal. Cuánto me cuesta imaginar a Piaget aplaudiendo la labor de esos burócratas compulsivos oficiales agarrados a los protocolos de actuación, creo que les llaman.
Es posible que mi crítica a la Logse, no sea más que la punto del iceberg, no se quede solo en eso y haya que ampliarla. Si todo el problema fuera facturable a la Logse, países como Francia y Alemania tendían Sistemas Educativos mucho más justos que nosotros y eso no es cierto. Pero ese tema lo dejo para otro día.Critico la Logse porque es lo que aquí se ha hecho. Si valoras las cosas por los resultados que producen, es con el objeto de asociar causas y efectos, aunque haya que tener control de unas cuantas variables intervinientes que se dan en todos los procesos complejos, y este lo es.
Critico la Logse porque es el paradigma que potencia muchas cosas que también critico. Y la critico desde una doble perspectiva.Desde el punto de vista teórico, porque se trata de un sistema filosófico o ideológico con pretensiones de científico. Renuncia a cuantificar, medir, comparar e inferir, y además es incapaz de salir de si misma para hacer autocrítica.Desde el punto de vista práctico, por los resultados. Muestro mi descontento, entre otra cosas, con: la reducción de los niveles de esfuerzo para el aprendizaje, con la prolongación artificial niñez y adolescencia, con de la sobreprotección familiar y escolar, con los bajos niveles de formación e información, etc. Y ello porque se generan o pueden generar: bajos niveles de tolerancia a la frustración muy válidos para la vida futura, un retraso prolongado de la maduración y de la autonomía, el egoísmo, egocentrismo e insolidaridad a los semejantes, la falta de movilidad social vertical, etc.etc.
Si todas estas cosas no fueran como son, sino al revés, sería tan logsiano como tu, si ello es posible. Pero mientras tanto, critico lo que debo criticar, independientemente de los adjetivos que me dediquen, si bien me reservo el derecho de dejar la polémica cuando considere que ha perdido el jugo, o cuando la capacidad de argumentación haya sido sustituída por la ramplonería del ataque personal, tan efectista como vacío.

Saludos.

Cordero

Nota.
Me alegro de tener un par de puntos de contacto contigo: las Matemáticas y la Informática. Es posible que en otros aspectos podamos tener amplias coincidencias, si no temes ser contaminado..

martes, marzo 22, 2005

Psicólogo no Logsiano

(Una matización y una ampliación a los comentarios que aparecen en la entrevista a Inger Enkvist, hecha por la Revista Magisterio).

Estoy casi totalmente de acuerdo con las ideas expuestas en la entrevista que desde Magisterio se hace a Inger Enkvist, también publicada por el sindicato SPS. Sin llegar a hacer un barrido tan sistemático, podemos llegar a estas conclusiones o parecidas.
Solo quería hacer unos comentarios. El primero es el matiz a una generalización que me afecta, y el segundo, sobre la continuidad de un pensamiento que queda solo apuntado, y que a modo de ejercicio intelectual, jugaré a plasmar.
En primer lugar, decir que soy Psicólogo, trabajo como Psicopedagogo en un instituto, y no me veo reflejado en un comentario que la autora hace sobre la posición de los psicopedagogos sobre el carácter de los conocimientos. No niego lo que ella ha afirmado, sé que es bastante cierto pero no totalmente cierto, y por tanto no es generalizable.
Por lo que a mi respecta, creo en la bondad de tener conocimientos, cuantos más mejor, si son de calidad entonces muchísimo mejor, pero voy más allá. Es posible que estos sean buenos independientemente de sus contenidos, es decir, pienso que se justifican no solo en cuando a su calidad sino también por la necesidad que crean en el individuo que los tiene de dotarse de un esquema mental y organizativo en el cual no todo cabe y mucho menos de cualquier manera.
Ciertamente que la lista de las Reyes Godos, el Sistema Periódico de los Elementos, las declinaciones latinas u otras 'barbaridades logsianas o conocimientos' que se enseñaban y aprendían cuando se enseñaba y se aprendía algo, no a todo el mundo le sirve, o no les sirven de igual manera a todos, pero es cierto que el empeño de aprender algo difícil y costoso, el superar el reto de hacerlo, el lograr recordarlo... , e incluso la forma de revelarte contra la autoridad que te lo imponía, eso, eso si fue positivo, aunque tampoco sé si lo fue para todos, puesto que por lo visto hay mucho traumatizado desde entonces dispuesto a tomarse la revancha.
¡¡¡ Cuánto echamos de menos en los institutos el deseo y la disposición para aprender de nuestros alumnos y como cambiaríamos si pudiéramos la risa bobalicona de los eternos adolescentes por ingenio aunque el propio profesor fuera la diana del mismo!!!
O sea, que existen psicopedagogos, al menos uno, que se niega a que lo metan en el saco de los técnicos obedientes de la cosa.
En segundo lugar, en un momento de la entrevista, Inger Enkvist hace comentarios sobre la gravedad de lo que ella piensa que está pasando en la educación, y duda de si es correcto ponerlo negro sobre blando por las sensibilidades que puede herir y porque son cosas que se han de ir asimilando poco a poco.
Como según mi opinión deja el tema abierto, especularé sobre lo que podía haber dicho y no dijo, pidiendo disculpas de antemano por lo osado de la tarea. Si además mis especulaciones no están en línea con su pensamiento las disculpas pedidas son dobles.
Ahora, un niño/alumno es presentado en sociedad como un ser que fundamentalmente nace sabido, es decir cuyo proceso natural de crecimiento le aportará la asimilación de todas o las más importantes conquistas que nuestra sociedad occidental ha ido alcanzando a través de su larga historia. No necesitará leer la tragedia griega para conocer la pasión, ni oir a Bach o Mozart para escuchar la belleza en estado puro, etc, etc. Nuestro niño, no necesitará conocimientos, se dice sin sonrojo, porque sabrá donde buscarlos.
Pero ¿cómo buscarás a Quevedo si no sabes lo que es la sátira, ni entenderías su lectura aunque te lo dieran buscado, porque no tienes conocimientos de entorno, ni léxicos, ni de otro tipo para contextualizarlo?; ¿que harías, en su caso tras buscarlo y encontrarlo?, ¿buscar a alguien que te lo intepretara, te lo explicara y te dijera donde y por qué tienes que reirte?
Si sobran los conocimientos en el aprendizaje, ¿qué es lo que queda?. Pues valores, procedimientos y otras cosas, todas ellas ciertamente muy importantes, pero que las debía traer puestas el alumno de su casa. El fracaso de campañas dedicadas a nuestros alumnos sobre los más variados temas tienen su base en que el proceso de imitación se lleva a cabo a partir de lo que el niño ve hacer y no de lo que el niño oye decir. Nada que ver, el ver hace con el oir decir.
Un alumno con una escolaridad desaprovechada, vacía de conocimientos, de capacidad de esfuerzo, lleno de lagunas, dificultades comprensivas y también expresivas, etc, puede ser un objeto preciado como futuro adulto.
Alguien, algunos de los poderes más activos y organizados de nuestra sociedad seguramente sabrán rentabilizar una situación basada en importantes masas humanas con poca formación y información, orientables, manejables, poco críticos con el sistema, poco capaces de comprender, incapaces de equivocarse porque son incapaces de decidir y con niveles de autonomía tan bajos que desde el punto de vista ético nos harán dudar de la existencia real y efectiva del principio de la libertad y de igualdad, esenciales en el sistema democrático. Grupos organizados que controlan la información, el poder político, el financiero, el ocio... podrían llevar años luchando por este modelo educativo que al final se está imponiendo de forma global.
No sabemos que nos depara el futuro, pero podemos seguir con la imaginación. ¿Cómo y de qué nos quejaremos cuando las limitaciones de comprensión de un mundo complejo como el nuestro sean tan grandes que no lleguemos tan siquiera ni a atisbar lo que está ocurriendo?
¿Qué haremos cuando necesitemos ayudas para abordar problemas cotidianos habituales como adquirir una hipoteca o firmar un contrato de trabajo o de arrendamiento, si nuestra formación no nos permite solucionarlos de forma autónoma?
Alguien, sin duda, actuará de intermediario entre lo que queremos y/o necesitamos y lo que podemos conseguir. Alguien será mediador entre nuestros deseos y la realidad, y podrá adaptar los primeros, manipular la segunda, o hacer ambas dos cosas, que con redundancia evitamos mejor la aparición de desajustes.
¿Estaremos eternamente agradecidos a estos valedores que saben responder adecuadamente a nuestras necesidades, incluso creándonoslas antes?
¿Serán esos valedores futuros, los mismos que también nos defendieron años atrás del ignominioso y conservador sistema de aprendizaje basado en conocimientos, jerarquías conceptuales, rigor y esfuerzo, transformándo el sistema educativo en mediocridad y almacenaje y al profesorado en burócratas obsesivos rellenando papeles inútiles que solo sirven para justificar clamorosas dedicaciones de los intermediarios entre la verdad absoluta y las aulas?
¿Qué precio tendremos que pagar y en qué especie lo pagaremos, a alguno de estos valedores? ¿Será esta forma de actuar, la compra de nuestra alma democrática?
¿Pudiera ser que el actual sistema educativo no fuera un accidente sino un producto acabado, es decir, el resultado de un proceso de diseño, financiado, seguido y corregido hasta ser implementado perfectamente? Y en ese caso, ¿quién lo habría diseñado?
Muchos poderes podrían participar en el reparto de los dividendos de una sociedad sin capacidad de crítica ni de reacción, obediente y sumisa.
Acabo aquí el supuesto, pero tu puedes continuarlo.
Todos podemos comenzar a pensar donde otros han acabado de hacerlo.Todos menos los que desconocen que el progreso de la humanidad se basa en conocimiento, en el saber solidario y compartible y que nadie puede llegar por si sólo y desde cero al nivel de conocimiento acumulado que ha necesitado la sociedad, millones de personas, durante miles de años y en cientos de lugares.

Saludos.

Cordero