sábado, noviembre 24, 2012

Contrapuntos educativos.


La cultura de la imagen genera cantidades ingentes de fracaso escolar porque lo que entra tan directamente requiere muy poca elaboración mental, trabajo y esfuerzo.

No creemos que facilitar mucho el aprendizaje se traduza en mejores logros, sino en menos esfuerzo, más pasividad mental, más divertimiento y por tanto, menos pensamiento y menos aprendizaje.

La autoestima solo se obtiene a través del esfuerzo personal, de la lucha por conseguir algo y de la capacidad de sobreponerte a los reveses que vas obteniendo.

La pedagogía moderna priva a los alumnos del placer del conocimiento al hacerles creer que solamente proporciona placer lo que hace reir o aquellas cosas que podemos conseguir inmediatamente.

Nuestro fracaso escolar es la deriva de aplicar PseudoPsicologías tan sonoras y huecas como acientíficas, de la mano de pedagogos oficiales expertos en nada, bajo la mirada pasota de políticos mediocres, en una sociedad entre hedonista, escéptica y confusa.

A base de tanto ludismo y juego, nuestros alumnos apenas saben lo que significa estudiar cuando acaban la ESO. El Centro Docente no es un lugar de diversión sino de Aprendizaje..., que a veces puede ser divertido, pero no lo es siempre.

En buena parte, tras años y años de escolaridad obligatoria (entre 13 y 15), obtenemos unos resultados mediocres. Muchos alumnos son simples sujetos complacidos, con sus antojos, caprichos y apetencias plenamente satisfechos.

El exceso de metodología y burocracia impuesta en los Centros, ha resultado ser el refugio natural del inculto para el que el acto de enseñar/aprender es incómodo dada su profunda cerrazón mental y desconocimiento de la realidad educativa.

En cierta medida nuestro Sistema Educativo, por acción u omisión, está potenciando la soberbia del ignorante frente a la humildad del estudioso. Esto suele traducirse en modelos imitativos dentro del Aula... donde los buenos tratan de pasar desapercibidos, dejando libre todo el espacio y protagonismo a provocadores y revientaclases que van al Instituto como quien va al Circo, a divertirse.

Tanta corrección política, tanto estar de acuerdo con las homilías lanzadas desde los púlpitos oficiales, tanto trágala disfrazado de modernidad y tanto relativismo dúctilmente asimétrico... está dando sus frutos. Algunos de ellos: mediocridad, nihilismo, ninisno..., son bien visibles.

Saludos

Cordero