sábado, noviembre 24, 2012

Contrapuntos educativos.


La cultura de la imagen genera cantidades ingentes de fracaso escolar porque lo que entra tan directamente requiere muy poca elaboración mental, trabajo y esfuerzo.

No creemos que facilitar mucho el aprendizaje se traduza en mejores logros, sino en menos esfuerzo, más pasividad mental, más divertimiento y por tanto, menos pensamiento y menos aprendizaje.

La autoestima solo se obtiene a través del esfuerzo personal, de la lucha por conseguir algo y de la capacidad de sobreponerte a los reveses que vas obteniendo.

La pedagogía moderna priva a los alumnos del placer del conocimiento al hacerles creer que solamente proporciona placer lo que hace reir o aquellas cosas que podemos conseguir inmediatamente.

Nuestro fracaso escolar es la deriva de aplicar PseudoPsicologías tan sonoras y huecas como acientíficas, de la mano de pedagogos oficiales expertos en nada, bajo la mirada pasota de políticos mediocres, en una sociedad entre hedonista, escéptica y confusa.

A base de tanto ludismo y juego, nuestros alumnos apenas saben lo que significa estudiar cuando acaban la ESO. El Centro Docente no es un lugar de diversión sino de Aprendizaje..., que a veces puede ser divertido, pero no lo es siempre.

En buena parte, tras años y años de escolaridad obligatoria (entre 13 y 15), obtenemos unos resultados mediocres. Muchos alumnos son simples sujetos complacidos, con sus antojos, caprichos y apetencias plenamente satisfechos.

El exceso de metodología y burocracia impuesta en los Centros, ha resultado ser el refugio natural del inculto para el que el acto de enseñar/aprender es incómodo dada su profunda cerrazón mental y desconocimiento de la realidad educativa.

En cierta medida nuestro Sistema Educativo, por acción u omisión, está potenciando la soberbia del ignorante frente a la humildad del estudioso. Esto suele traducirse en modelos imitativos dentro del Aula... donde los buenos tratan de pasar desapercibidos, dejando libre todo el espacio y protagonismo a provocadores y revientaclases que van al Instituto como quien va al Circo, a divertirse.

Tanta corrección política, tanto estar de acuerdo con las homilías lanzadas desde los púlpitos oficiales, tanto trágala disfrazado de modernidad y tanto relativismo dúctilmente asimétrico... está dando sus frutos. Algunos de ellos: mediocridad, nihilismo, ninisno..., son bien visibles.

Saludos

Cordero

miércoles, julio 01, 2009

Primaria Cataluña 2009

Primaria en Cataluña. 2009.

“Ahora sabemos cuales son los problemas y dificultades, y sabemos que hay esperanza y posibilidad de mejora”. ¡¡¡Por fin!!!

Hasta ahora, no. O sea, que los informes de las Pruebas PISA, el Estudio de la Fundación Bofill, y otros muchos trabajos, extraoficiales (no becados, financiados, subvencionados por la nuestra Administración), localizables en Internet, no existieron para nuestro Conseller, o mejor dicho, no tenían suficiente veracidad. Pues bueno. Es una suerte que Usted trabaje en la cosa Pública, porque con la que está cayendo, esta argumentación antes los accionistas de una empresa sería la antesala del despido.
En general, uno de cada 4 alumnos no adquiere los conocimientos básicos en Castellano, Catalán ni Matemáticas en 6º de Primaria, pero irán a Secundaria igualmente. O sea que la ESO en Cataluña, de inicio, ya sale con un 25% de Fracaso Escolar. Ténganlo en cuenta cuando analicen el Fracaso de Secundaria y no nos digan que es de 30%, porque es inverosímil (pregunten al Profesorado de Secundaria).
Por si esto fuera poco, dos observaciones más:
1ª.- La población infantil de 6º de Primaria evaluada, y base para estos resultados, deja fuera a los alumnos inmigrantes que se han incorporado hace poco tiempo y aún no tienen suficiente dominio de castellano y catalán. Estos alumnos, son reales, existen, forman parte de las Aulas, de los conocimientos, de las dinámicas de las clases… ¡No crean que no existen porque no los cuentan en su informe!
2.- Se ha dicho que la prueba está maquillada, es decir, que es más fácil de lo que corresponde a 6º de Primaria. Ello permitiría obtener mejores resultados y prolongar “una normalidad que ya sólo ustedes sustentan”. Puede ser una información tendenciosa, cierto. Lo comprobaremos e informaremos de ello a través de cauces neutros como Internet. Pero con su histórico, me refiero al histórico del Departament (exámenes de selectividad fáciles en Castellano y difíciles en Catalán que justifiquen más de lo mismo en Inmersión Lingüística, por ejemplo), caben esas especulaciones e incluso otras mucho más arriesgadas.

Se dice que la situación educativa es muy compleja y que no hay explicaciones sencillas. Desde el Consejo Superior de Evaluación del Sistema Educativo, se nos explica que “no se han detectado casos de alumnos que sepan mucho catalán y poco castellano o al revés, sino que los que han sacado buenas notas en catalán, también lo han hecho en castellano”. Claro! Añado yo, y en Matemáticas, y en Inglés.
O sea que el que es bueno (o está apoyado desde su familia) es bueno en todo, y el que no lo es, pues eso, que nada.
¿Saber esto nos ha costado un millón de Euros? ¿Para esto necesitamos un Consejo Superior de Evaluación Educativa? ¿Qué pinta entonces la escuela?, ¿Donde queda la función niveladora de la Educación? ¿La Educación ya no permite luchar contra la Desigualdad Social? ¿La Escuela ya es sólo, otra vez, almacenaje de niños, para que sus padres puedan trabajar, como en sus orígenes? ¿Cómo se puede explicar la simpleza de su explicación?

Según la FAPAC, la cifra del fracaso en Primaria, coincide con las tasas de alumnos que no consiguen graduarse en Secundaria, lo que se consideró "indicativo". "Es como si los alumnos con cierto atraso en Primaria son los que se quedan luego descolgados en la Secundaria". Otra perla.
No sé cual será su mirador. El mío es un Instituto del Área Industrial de Barcelona. Mantener los niveles de fracaso en Secundaria en tasas del 25 % es como negar la existencia de la Adolescencia con todas sus implicaciones en el tema Educativo y Personal, que tan bien conocen Profesores y Padres.

En absoluto es despreciable el momento cronológico de la Adolescencia en la ESO, que sólo se asoma en Primaria. Buena parte de los contenidos no aprendidos parecen como sustituidos por falta de hábitos de trabajo, niveles mínimos de tolerancia a la frustración, falta de autonomía y trabajo individual, maximización de derechos y minimización de deberes…y otra larga lista que el lector puede ir completando. Ciertamente, estas conductas no son generalizables, pero tampoco ignorables. En mayor o menor grado, existen, influyen, y determinan.
Mantener que el fracaso educativo es del 25% tanto en Primaria como en ESO, significa que el fracaso en ESO es nulo o mínimo, lo cual no es cierto. Puede que lo sea para los datos de la Administración, pero no son datos reales, sino maquillados, edulcorados para una clientela social tan poco interesada en conocer la realidad educativa, como sus políticos electos. Cada pueblo tiene los gobernantes que se merece, dice el refrán. ¿Pero cómo se maquillan los resultados educativos? Pues muy simplemente, cambiando el nombre a las realidades que existen para que cuando ustedes hablen nadie les entienda, disuadiendo/prohibiendo determinadas opciones del profesorado, forzando la burocratización hasta el límite delante de situaciones no deseables por la Administración, Planes de Mejora (más conocidos como Euros por aprobados) y un largo etc.
Parece que el denominador común de toda esta perversión es el desprecio por la realidad educativa y el control por la información presentada.

Respecto a los resultados en la enseñanza Publica, la Concertada y Privada, ahí los tenemos. A lo largo de mis 35 años de trabajo como docente, nunca habían sido los resultados tan negativos en la Enseñanza Pública. Hay diferencias de hasta 13 puntos porcentuales de mejora en los Centros Concertados, y de bastante más en los Privados. ¿Explicaciones? Las de siempre, que las familias más desestructuradas y económicamente con menos ingresos llevan los hijos a la Pública porque es gratuita. Y punto. Se acabó la reflexión.
Ciertamente esa es una variable real, contable, que influye, pero seguramente no explica la totalidad de las diferencias. Existen otras variables que hay que poner encima de la mesa: la Pública es más costosa, en general tiene profesores con no menos formación, tiene mejores recursos materiales y menos ratios profesor/alumno.
Por si fuera de interés, podemos dar algunas ideas. Cada uno será libre de pensar el peso que le adjudica a cada una de ellas.
1ª.- El Sistema Público, funcionarial, es más permeable a la lluvia fina de la nueva filosofía educativa, diseñada por pedagogos de laboratorio, perfectos desconocedores de la realidad educativa, que en ausencia de cualquier corpus teórico mínimamente contrastable con la praxis diaria en las Aulas, inventan un lenguaje vacuo, insustancial y pretencioso del que se eligen a sí mismos como únicos representantes y desde el que, cual sacerdotes, predican sin que les salpique una realidad que se niegan a conocer.
2ª.- Determinadas políticas educativas, cuestionadas por el Profesorado (no repetición, indisciplina…), son empujadas por una Inspección Educativa al servicio de las Administración y no del Administrado. Si para ello hay que echar mano de procedimientos burocráticos con carácter excepcional, pues se hace (Comisiones de Servicio, mantener un puesto de trabajo, adjudicaciones, vacantes, recursos…). Premiar a “sus” buenos, y no premiar a “sus” malos… con nuestro dinero, es sutil y efectivo forma de fomentar la docilidad… y el pasotismo funcionarial.
3ª.- Resumiendo, Leyes, Decretos, Resoluciones, y demás regulaciones, muchas de ellas con retranca, son mejor aceptadas por obedientes funcionarios en vías de ascenso (no todos por supuesto), que por profesores dependientes de una institución privada, más interesada en resultados efectivos que en políticas efectistas, buenistas y “progresistas” de titular y foto. Es decir, propaganda.
La Educación como campo de experimentación de cuantas teorías y tonterías se le vaya ocurriendo al de turno. Y a la mínima, una nueva Ley Educativa, normalmente peor que la anterior, aunque más costosa. No hay tiempo para aburrirse ni para dejar de sorprenderse.

En relación al promedio de nota en las pruebas en Castellano están unos 3 puntos por debajo del Catalán. ¿Este dato se reparte más o menos igual en todos los centros? ¿Y si lo tomamos respecto a las Zonas Rurales o Urbanas de Cataluña? ¿Y si lo referimos a lugares con mucha población de habla castellana?
Esperemos ir viendo resultados para poder hacer nuestra hipótesis, que no suelen coincidir, con las correctas interpretaciones de nuestros dirigentes.

Seguiremos.

'Cordero'

viernes, febrero 01, 2008

Euros por aprobados

Cuando uno, con casi 35 años de docencia, no deja de sorprenderse con los nuevos desaguisados educativos que nos cocinan en beneficio propio los agentes políticos de turno, tan análogos a sus rivales como dos gotas de agua, pudiera pensarse que se está fuera de la realidad educativa, es decir, fuera de juego. Y es verdad. Estoy fuera de juego, al menos de su juego, que me niego a jugar y que paso a comentar.
La ley de medidas de millora a l’ensenyament, puesta en funcionamiento en Cataluña, y que es conocida por muchos docentes como “dinero por aprobados”, básicamente consiste en eso: en dar dinero a un centro público a cambio de reducir, a tasas digeribles, el fracaso escolar. Es decir, una buena partida de gasto público se dedica a maquillar la realidad para que ésta no presente sus efectos perversos en estado puro y pueda perjudicar a los gestores y responsables políticos del engendro que tenemos entre manos.
Ya ha pasado el tiempo en que el ruido de las alarmas del fracaso escolar se podía controlar con el ruido mediático de los embaucadores y propagandistas de casa nostra, perfectamente organizado y orquestado. Con razón se quejan de la Globalización, con lo bien que estábamos en el Edén primigenio sin que nadie en la tribu cuestionase quién es el que manda…
Las pruebas PISA, que ponen el dedo acusador en nuestro Sistema Educativo, nos sitúan donde estamos, en la cola de la OCDE, y a nuestras autoridades, con poca capacidad de encaje y ninguna autocrítica, todo lo que se les ocurre es maquillar cifras, como si el problema fueran las cifras y no la gran proporción de alumnos reales con niveles de formación deficientes. Es como si no les importara que existieran alumnos de 16 años con graves déficits académicos. Es como si lo que realmente les importara es que ese alumno con problemas saliera a la luz, que la sociedad tomara conciencia pública de que existen desajustes serios en esa Arcadia Feliz, en que llevan convirtiendo el Sistema Educativo tantos años. Y, supongo, con razón, temen que el tema les explote en la cara.
Por eso el Plà de Millora. Es de creer que los mejores leguleyos de la casa, han trabajado duro para suavizar las grandes líneas del plan “dinero por aprobados”, tapando agujeros aquí, evitando críticas allá, difuminando aristas, porque claro, ha de ser aprobado en Claustro, en muchos a mano alzada, parece ser, eso sí, sin dejar de lado el buen rollito en ninguno de los casos.
El caso es que con la consabida burocracia consustancial a un sistema lento, torpe y rígido, los centros firman y obtienen por adelantado unos recursos extras (hablamos de millones de las antiguas pesetas) a cambio de que las tasas de fracaso escolar vayan bajando de forma progresiva y escalonada. El centro dispone de ese dinero para aquellos menesteres que prefiera, lo cual es una perita en dulce en un sistema educativo con una falta de inversión tan notoria que lo hace uno de los más baratos y asfixiados de España.
¿Y qué ocurre si no se incrementan los aptos de forma significativa? Pues que te quitan la subvención, y pasas a ser público puro y duro, reaccionario por no entrar en el juego de compraventa y conservador por no estar por la mejora de la educación.
Pero, ¿existe alguna previsión de cambio en aquellos aspectos que se valoran como más inconvenientes para que la formación de nuestros alumnos pueda ser mejor?
¿Cómo se modifican aspectos tales como la disciplina en las aulas, la promoción automática, la incorporación del alumnado emigrante, la autoridad del profesor, la mejora de la excelencia (que es de las más bajas de Europa), la falta de respuestas y de alternativa a los alumnos que a los 16 o 17 años no quieren asistir a clases, a estas clases (porque podrían ser de otra manera)?
¿Cómo reconvertimos los lugares de divertimiento y guardería en se han convertido bastantes de nuestros centros, en espacios de formación, respeto, tolerancia, conocimiento y aprendizaje?
¿Cómo se pueden mejorar los resultados de un proceso complejo, sin tocar de forma relevante ninguno de los principios, presupuestos, metodologías y filosofía del mismo, cuando justamente son estos, repito estos, los mayores responsables del problema?
Descartada la magia, solamente existe una manera, nominalista y trucada, eso sí. Es denominar a lo mismo de otra manera.
El 30, o 40 o 50% de los alumnos de 4º de ESO, fracasan porque tras 13 años de escolaridad, no han adquirido unos niveles de competencias instrumentales (comprensión de textos escritos, resolución de problemas, interpretación de situaciones cotidianas representadas gráficamente…) suficientes para darse explicaciones coherentes de la realidad y del mundo del que forman parte. Es decir, lo que antes denominábamos fracaso, pretenden que hoy lo denominemos no fracaso. Es la misma cantata del progresa adecuadamente de Primaria llevado ahora a Secundaria. Marear la perdiz, diría un castizo.
Se supone que así prolongarán la anestesia social lo suficiente para continuar otra legislatura. Y probablemente tengan razón.

Saludos.

'Cordero'

domingo, noviembre 12, 2006

Docente cabreado

Vaya título tan redundante, ¿no?.
Como si fuera posible no estar cabreado siendo docente en esta España tan nuevo rica como autocomplaciente, con un sistema educativo que sin grandes esfuerzos nos está situando en los países de cola en lo que a instrucción se refiere.
Y todo el mundo contento.
Contentos nuestros políticos, muchos de ellos políticos del cuanto peor, mejor.
Contentos los padres, porque el Sistema Educativo casi les garantiza la diversión total de su progenie entre 3 y 16 años, en este circo en que han convertido escuelas e institutos.
Contentas las Administraciones Educativas porque año tras año logran maquillar los datos que nos presentan sobre el fracaso escolar, que no sobre el fracaso en si mismo.
Contentos el tropel de asesores oficiales y asesores de los asesores , que dada la amplitud de la problemática de la cosa educativa, tienen asegurado su trabajo de hablar y proponer, así, a lo tonto, cuanto les pase por la cabeza sin ningún tipo de límite. Ya se sabe, suelen ser vanguardia y las vanguardias no son juzgadas ni por Dios ni por la Historia, y mucho menos por los profes de Aula.
Contentos los alumnos (¿algunos?, ¿muchos?...) en ese laboratorio de desmadre e impunidad en que se han convertido (¿algunas?, ¿muchas?...) nuestras aulas, donde un 15-20% de los alumnos absorven el 80-85% de la energía del profesor mientras que el resto, el 80-85%, se han de conformar con las migajas.
Y creo que también contentos los Agentes Sociales, léase Patronales Empresariales y Sindicatos de Clase, (y vaya clase) porque el Sistema Educativo les devuelve (¿algunos?, ¿muchos?...) perfectos ciudadanos: dóciles, poco autónomos, obedientes y sin capacidad de meterse en muchos tinglados.
Los únicos descontentos son algunos profesores, los que no suelen aspirar a cambiar la tiza por el despacho y los alumnos reales por papeles.
Pero eso no importa en este gran espectáculo de divertimento, en este gran negocio en que han convertido lo que antes se llamaba Educación.
Saludos

sábado, diciembre 31, 2005

Educación

Malos tiempos corren para la Educación en general en la sociedad moderna.
En el caso de España, el nuevo estatus de "nuevo rico", la comodidad de mirarse el ombligo, la renuncia a todo lo que no sea el corto plazo y el facilismo impuesto, no deja abordar el problema de fondo.
El reloj y el deterioro educativo continuan inexorablemente desde aquel pistoletazo de salida que fue el año 1989/90. Y parece que la situación, por mala que sea, es susceptible de emperorar. El año 2003, nuestro Sistema Educativo, si así se le quiere llamar, figuró entre los más deficientes de los países de la O.C.D.E.
El bajón era significativo respecto a las calas anteriores tanto en formato P.I.S.A. como de T.I.M.M.S., su precedente.
Seguramente veremos cosas peores en el Próximo P.I.S.A., aunque no mucho perores porque estamos bastante cerca del final.
Nuestros políticos, esos vendedores de humo que trafican sin decoro con las esperanzas e ilusiones de generaciones enteras y esos sindicatos instalados en el pesebrismo, no están por la labor. Y la sociedad por ellos representada, tampoco.
Después de un duro trabajo de años, se ha instalado en la sociedad que no es correcto ser exigentes con los alumnos en las aulas ni con los niños en las familias, so pena de aparecer como fuera del redil de lo progresista y moderno, es decir convertirse en una antigualla no digna de ser escuchada y menos aún comprendida.
Los medios, unos más que otros, vigilan y persiguen la heterodoxia, repartiendo etiquetas de lo que es correcto, es decir, lo que nos dicen que es correcto, y todo lo demás, que se puede reducir en tres palabras utilizadas como latiguillos: conservador, carca, facha. Hasta aquí llega la capacidad conceptual de los mentores. Ahí se agota su recorrido argumentativo.
Y después de esto ya sólo queda repetición de consignas, megafonía, amplificación y ruido. Mucho mucho ruido.

Saludos

Cordero

miércoles, marzo 23, 2005

Prefiero las ideas

(Respuesta a un ataque frontal en cuanto que crítico con la LOGSE. -2-).

Hola amigo
Dejaré de lado el ataque personal puesto que como persona me mereces todos los respectos, y como profesional, también. Tampoco me dedicaré a defenderme de las lindezas que me has lanzado, que por cierto, están muy elaboradas. Entiendo el recurso pero creo que los vuelos en rasante dan menos visión de conjunto y disminuyen enormemente el foco.
Te ruego, por tanto, que no entiendas el ataque a tus ideas como un ataque a ti mismo. Ni es mi pretensión, ni considero que el cuerpo a cuerpo personal sirva para mucho, excepto para liberar testosterona.Te aclaro un par de puntos y volvemos a las ideas. ¿Te parece?
¿Hablas de Psicopedagogo reconvertido? No. Mira. Fui profesor de matemáticas en EGB. Saqué mi oposición a los 20 años. Más tarde estudie Psicología por la noche, porque durante el día trabajaba. También hice, por la noche, la especialidad de Transtornos de Lenguaje y Audición en San Pablo, dos añitos, y un curso (ahora master) de Pedagogía Terapéutica.
Tras acabar la licenciatura hice el Doctorado, ya sabes Cursos Monográficos y 4 años de investigación. Cuando me interesó dar el paso a Secundaria, lo hice. Saqué mi oposición, como tu, supongo y estoy en un instituto. Esta es mi reconversión.
Respecto a los Psicopedagogos, sé lo que se piensa en general, que es lo que piensas tu, y también yo. Lo soy, pero no me siento incluido en ese grupo, porque ni tengo las mismas creencias, ni hago lo que ellos hacen. Para empezar, ellos viven a la sombra de una Logse en que no creo, en calidad de expertos, que tampoco lo son. Se podría decir, para no exagerar, que algunos de estos profesionales representan la parte más siniestra de la Logse, la del intermediario entre la verdad absoluta y la praxis, la del ninguneo del Profesor, la del experto en burocracia, la del diagnosticador de obviedades, la de defensor del niño roussuniano (todos los niños son buenos por ser niños, que contradice la experiencia) que tanto te gusta, etc.
No trabajo con papeles ni protocolos, ni estoy todo el día reunido, sino con alumnos con deficiencias de escolarización y complicados y lo hago las horas que me son asignadas. Y además tengo ganas de que se regule el papel del Psicopedagogo en los IESs, en Cataluña, como ya lo está en el resto de España. Soy crítico con lo que hace el Psicopedagogo en la actualidad, aquí, pero defiendo que puede hacer cosas mucho mejores, a poco que se posibilite.Pero volvamos a lo nuestro.
Criticas, como yo, al Psicopedagogo, pero el énfasis que tu haces hacia lo personal (hacen eso porque son Psicopedagogos), yo lo desplazo hacia la ideología que lo da sustenta (hacen esta burocracia, porque están concebidos para ello, y fuera de ella no tienen sitio). Y obviamente, discrepo de esta concepción. Ya lo creo que podemos hacer cosas, y cosas buenas, pero no son estas que hacemos.Hablas de los padres del cognitivismo: Piaget, Vigotsky... Yo comparto el núcleo del pensamiento científico de estos autores, pero no la utilización que se ha hecho de ellos a modo de cobertura científica para dar una patina de barniz moderno y progre a lo que no era en el fondo más que método, caja negra y desprecio por los resultados. Ni el método ha resultado útil, ni el alumno es una caja negra, ni los resultados son despreciables.
Estos autores, y otros, nos han demostrado que la Psicología no es esto que se hace, aunque esto que se hace, la Logse lo venda como tal. Cuánto me cuesta imaginar a Piaget aplaudiendo la labor de esos burócratas compulsivos oficiales agarrados a los protocolos de actuación, creo que les llaman.
Es posible que mi crítica a la Logse, no sea más que la punto del iceberg, no se quede solo en eso y haya que ampliarla. Si todo el problema fuera facturable a la Logse, países como Francia y Alemania tendían Sistemas Educativos mucho más justos que nosotros y eso no es cierto. Pero ese tema lo dejo para otro día.Critico la Logse porque es lo que aquí se ha hecho. Si valoras las cosas por los resultados que producen, es con el objeto de asociar causas y efectos, aunque haya que tener control de unas cuantas variables intervinientes que se dan en todos los procesos complejos, y este lo es.
Critico la Logse porque es el paradigma que potencia muchas cosas que también critico. Y la critico desde una doble perspectiva.Desde el punto de vista teórico, porque se trata de un sistema filosófico o ideológico con pretensiones de científico. Renuncia a cuantificar, medir, comparar e inferir, y además es incapaz de salir de si misma para hacer autocrítica.Desde el punto de vista práctico, por los resultados. Muestro mi descontento, entre otra cosas, con: la reducción de los niveles de esfuerzo para el aprendizaje, con la prolongación artificial niñez y adolescencia, con de la sobreprotección familiar y escolar, con los bajos niveles de formación e información, etc. Y ello porque se generan o pueden generar: bajos niveles de tolerancia a la frustración muy válidos para la vida futura, un retraso prolongado de la maduración y de la autonomía, el egoísmo, egocentrismo e insolidaridad a los semejantes, la falta de movilidad social vertical, etc.etc.
Si todas estas cosas no fueran como son, sino al revés, sería tan logsiano como tu, si ello es posible. Pero mientras tanto, critico lo que debo criticar, independientemente de los adjetivos que me dediquen, si bien me reservo el derecho de dejar la polémica cuando considere que ha perdido el jugo, o cuando la capacidad de argumentación haya sido sustituída por la ramplonería del ataque personal, tan efectista como vacío.

Saludos.

Cordero

Nota.
Me alegro de tener un par de puntos de contacto contigo: las Matemáticas y la Informática. Es posible que en otros aspectos podamos tener amplias coincidencias, si no temes ser contaminado..

martes, marzo 22, 2005

Psicólogo no Logsiano

(Una matización y una ampliación a los comentarios que aparecen en la entrevista a Inger Enkvist, hecha por la Revista Magisterio).

Estoy casi totalmente de acuerdo con las ideas expuestas en la entrevista que desde Magisterio se hace a Inger Enkvist, también publicada por el sindicato SPS. Sin llegar a hacer un barrido tan sistemático, podemos llegar a estas conclusiones o parecidas.
Solo quería hacer unos comentarios. El primero es el matiz a una generalización que me afecta, y el segundo, sobre la continuidad de un pensamiento que queda solo apuntado, y que a modo de ejercicio intelectual, jugaré a plasmar.
En primer lugar, decir que soy Psicólogo, trabajo como Psicopedagogo en un instituto, y no me veo reflejado en un comentario que la autora hace sobre la posición de los psicopedagogos sobre el carácter de los conocimientos. No niego lo que ella ha afirmado, sé que es bastante cierto pero no totalmente cierto, y por tanto no es generalizable.
Por lo que a mi respecta, creo en la bondad de tener conocimientos, cuantos más mejor, si son de calidad entonces muchísimo mejor, pero voy más allá. Es posible que estos sean buenos independientemente de sus contenidos, es decir, pienso que se justifican no solo en cuando a su calidad sino también por la necesidad que crean en el individuo que los tiene de dotarse de un esquema mental y organizativo en el cual no todo cabe y mucho menos de cualquier manera.
Ciertamente que la lista de las Reyes Godos, el Sistema Periódico de los Elementos, las declinaciones latinas u otras 'barbaridades logsianas o conocimientos' que se enseñaban y aprendían cuando se enseñaba y se aprendía algo, no a todo el mundo le sirve, o no les sirven de igual manera a todos, pero es cierto que el empeño de aprender algo difícil y costoso, el superar el reto de hacerlo, el lograr recordarlo... , e incluso la forma de revelarte contra la autoridad que te lo imponía, eso, eso si fue positivo, aunque tampoco sé si lo fue para todos, puesto que por lo visto hay mucho traumatizado desde entonces dispuesto a tomarse la revancha.
¡¡¡ Cuánto echamos de menos en los institutos el deseo y la disposición para aprender de nuestros alumnos y como cambiaríamos si pudiéramos la risa bobalicona de los eternos adolescentes por ingenio aunque el propio profesor fuera la diana del mismo!!!
O sea, que existen psicopedagogos, al menos uno, que se niega a que lo metan en el saco de los técnicos obedientes de la cosa.
En segundo lugar, en un momento de la entrevista, Inger Enkvist hace comentarios sobre la gravedad de lo que ella piensa que está pasando en la educación, y duda de si es correcto ponerlo negro sobre blando por las sensibilidades que puede herir y porque son cosas que se han de ir asimilando poco a poco.
Como según mi opinión deja el tema abierto, especularé sobre lo que podía haber dicho y no dijo, pidiendo disculpas de antemano por lo osado de la tarea. Si además mis especulaciones no están en línea con su pensamiento las disculpas pedidas son dobles.
Ahora, un niño/alumno es presentado en sociedad como un ser que fundamentalmente nace sabido, es decir cuyo proceso natural de crecimiento le aportará la asimilación de todas o las más importantes conquistas que nuestra sociedad occidental ha ido alcanzando a través de su larga historia. No necesitará leer la tragedia griega para conocer la pasión, ni oir a Bach o Mozart para escuchar la belleza en estado puro, etc, etc. Nuestro niño, no necesitará conocimientos, se dice sin sonrojo, porque sabrá donde buscarlos.
Pero ¿cómo buscarás a Quevedo si no sabes lo que es la sátira, ni entenderías su lectura aunque te lo dieran buscado, porque no tienes conocimientos de entorno, ni léxicos, ni de otro tipo para contextualizarlo?; ¿que harías, en su caso tras buscarlo y encontrarlo?, ¿buscar a alguien que te lo intepretara, te lo explicara y te dijera donde y por qué tienes que reirte?
Si sobran los conocimientos en el aprendizaje, ¿qué es lo que queda?. Pues valores, procedimientos y otras cosas, todas ellas ciertamente muy importantes, pero que las debía traer puestas el alumno de su casa. El fracaso de campañas dedicadas a nuestros alumnos sobre los más variados temas tienen su base en que el proceso de imitación se lleva a cabo a partir de lo que el niño ve hacer y no de lo que el niño oye decir. Nada que ver, el ver hace con el oir decir.
Un alumno con una escolaridad desaprovechada, vacía de conocimientos, de capacidad de esfuerzo, lleno de lagunas, dificultades comprensivas y también expresivas, etc, puede ser un objeto preciado como futuro adulto.
Alguien, algunos de los poderes más activos y organizados de nuestra sociedad seguramente sabrán rentabilizar una situación basada en importantes masas humanas con poca formación y información, orientables, manejables, poco críticos con el sistema, poco capaces de comprender, incapaces de equivocarse porque son incapaces de decidir y con niveles de autonomía tan bajos que desde el punto de vista ético nos harán dudar de la existencia real y efectiva del principio de la libertad y de igualdad, esenciales en el sistema democrático. Grupos organizados que controlan la información, el poder político, el financiero, el ocio... podrían llevar años luchando por este modelo educativo que al final se está imponiendo de forma global.
No sabemos que nos depara el futuro, pero podemos seguir con la imaginación. ¿Cómo y de qué nos quejaremos cuando las limitaciones de comprensión de un mundo complejo como el nuestro sean tan grandes que no lleguemos tan siquiera ni a atisbar lo que está ocurriendo?
¿Qué haremos cuando necesitemos ayudas para abordar problemas cotidianos habituales como adquirir una hipoteca o firmar un contrato de trabajo o de arrendamiento, si nuestra formación no nos permite solucionarlos de forma autónoma?
Alguien, sin duda, actuará de intermediario entre lo que queremos y/o necesitamos y lo que podemos conseguir. Alguien será mediador entre nuestros deseos y la realidad, y podrá adaptar los primeros, manipular la segunda, o hacer ambas dos cosas, que con redundancia evitamos mejor la aparición de desajustes.
¿Estaremos eternamente agradecidos a estos valedores que saben responder adecuadamente a nuestras necesidades, incluso creándonoslas antes?
¿Serán esos valedores futuros, los mismos que también nos defendieron años atrás del ignominioso y conservador sistema de aprendizaje basado en conocimientos, jerarquías conceptuales, rigor y esfuerzo, transformándo el sistema educativo en mediocridad y almacenaje y al profesorado en burócratas obsesivos rellenando papeles inútiles que solo sirven para justificar clamorosas dedicaciones de los intermediarios entre la verdad absoluta y las aulas?
¿Qué precio tendremos que pagar y en qué especie lo pagaremos, a alguno de estos valedores? ¿Será esta forma de actuar, la compra de nuestra alma democrática?
¿Pudiera ser que el actual sistema educativo no fuera un accidente sino un producto acabado, es decir, el resultado de un proceso de diseño, financiado, seguido y corregido hasta ser implementado perfectamente? Y en ese caso, ¿quién lo habría diseñado?
Muchos poderes podrían participar en el reparto de los dividendos de una sociedad sin capacidad de crítica ni de reacción, obediente y sumisa.
Acabo aquí el supuesto, pero tu puedes continuarlo.
Todos podemos comenzar a pensar donde otros han acabado de hacerlo.Todos menos los que desconocen que el progreso de la humanidad se basa en conocimiento, en el saber solidario y compartible y que nadie puede llegar por si sólo y desde cero al nivel de conocimiento acumulado que ha necesitado la sociedad, millones de personas, durante miles de años y en cientos de lugares.

Saludos.

Cordero